Si analizamos desde una perspectiva de género el sistema previsional, vemos que una de las personas más perjudicadas con el Sistema de Pensiones chileno precisamente es la mujer, por dos razones:
Las mujeres viven más
Las mujeres logran acumular menos fondos para su pensión
¿Por qué?
Por su menor incorporación al mercado del trabajo
Por las interrupciones a consecuencia de la maternidad
Por tener acceso a trabajo feminizados, más precarios y peor remunerados